En este mes de septiembre quisiera darle las gracias a mi papá, Eric Muñoz, quien me tuvo a los 22 años (casi mi edad jajaja), por haberme regalado una de las carreras más lindas; la pedagogía y más encima en educación musical...quisiera agradecerle porque por primera vez tengo un contrato y con mi primer sueldo pude comprar una lavadora y un par de cosas más. Pero lo más emocionante es que hoy recibí un aguinaldo por parte del estado por ser funcionaria pública, me llene de felicidad; no pude evitarlo. Pero mi felicidad iba más allá de la cantidad de dinero, la alegría vino al saber que podría comprar harto vino para hacer un borgoña, muchos terremotos, mote con huesillo, harto pebre, hartas chelitas, una rica carne (algún día espero ser vegetariana, pero me gusta mucho el lomo vetado, que terrible) y salir a pasear por toooodo Santiago. Como todo lo bueno tiene algo malo; es que en Santiago el 20 de septiembre no es feriado, por lo que sólo tengo libre el lunes 19 no podré viajar a Coquimbo a ver a mi familia, ni podré ir a la Pampilla de San Isidro (Valle de Elqui) con mis amigos, ni hacer un paseíto al desierto florido. Sin embargo disfrutaré y bailaré cueca más zapateado y escobillado que nunca, tikitikiti!!