
Jamás he estado a la vanguardia
de la tecnología, sino todo lo contrario, cuando todos tenían discman, yo
recién estaba usando mi primer personal stereo.
Aún recuerdo en el colegio
cuando el celular no era algo masivo y con mis amigas quedábamos de juntarnos; si
alguna llegaba atrasada había que esperarla no más, no teníamos como ubicarla,
los teléfonos públicos estaban en cada esquina y el cyber del barrio siempre
estaba lleno. Si ibas a visitar a tus amigos llegabas sin previo aviso, hoy tenemos que avisar por face, por whatsapp o por celular que
queremos hacer una visita, las cosas ya no son naturales, son programadas y
aquí estamos acostumbrándonos a este nuevo mundo, a estas nuevas relaciones, a
esta nueva forma de comunicarnos, de ver y vivir la vida, las cosas van pasando muy rápido
y nadie quiere perdérselas. Pero en ese intento a veces perdemos lo que está
más cerca; un abrazo, una mirada, un cariño.